viernes, 31 de octubre de 2014

Menudo desastre en La Rosaleda

Si hay una palabra que define el partido de la semana pasada frente al Málaga, esa es "DESASTRE". Aun así, el Rayo debe olvidar rápidamente la dura derrota sufrida (4-0) ante un buen conjunto como el Málaga, que esta temporada esta yendo a más y está creciendo mucho, para reponerse y seguir luchando por estar lo más arriba posible.


Desde el minuto uno se vio lo enchufado que estaba el Málaga y lo que podía ocurrir: errores defensivos uno detrás de otro que propiciaron, primero un balón que saca Amaya bajo palos tras remate de Castillejo y luego el gol de Samu García a los 6 minutos. Toño no pudo hacer nada, de hecho, fue el hombre que evitó una goleada histórica. El partido se puso cuesta abajo para el equipo de la Albufera. Ni siquiera los cambios 'a lo Jémez' pudieron evitar la dolorosa derrota. A los 21 minutos llegaba el segundo gol, obra de Sergi Darder a pase de Amrabat, que estuvo espectacular todo el partido.


Cuando parecía que el Rayo empezaba a espabilar levemente, llegó uno de esos goles que llamamos psicológicos y mató el partido. Además del minuto en el que se marcó (45), fue un gol de vaselina tras una pérdida de Trashorras. El Rayo estaba pidiendo la hora y aún quedaban 45 minutos de partido para olvidar.


Tras comenzar la segunda parte, ya sin Trashorras en el campo, Amaya cometió un penalti para evitar un gol clarísimo, agarrando a Samu García. Amrabat hizo el cuarto desde los 11 metros y culminó un partidazo del equipo de la Costa del Sol, que se sitúa 7º con 15 puntos, cuatro más que el Rayo, que es 9º con 11.

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