Al Eibar le sobraron los primeros minutos del partido. Concretamente los primeros 25. Durante esos primeros 25 minutos el Eibar fue un equipo inexperto en primera que se 'comió' las marcas de Miranda y Mandzukic en las jugadas a balón parado y se vio con un 2-0 abajo muy pronto.
A partir de ahí, el Atlético se relajó y bajó la intensidad, y llegó el golazo de Abraham Minero. Jugada preciosa al primer toque que culminó con un bonito efecto en la escuadra de Moyá, impasible. Y pudieron ser más si el equipo vasco hubiera afinado un poco más su puntería, porque este Eibar no le teme a nadie.
Y es tan cierto que no le teme a nadie. Se va al parón con 3 puntos de 6, pero con la sensación de que ha estado a punto de salir por la puerta grande del Calderón. Los aplausos en la grada al gol de Abraham Minero lo corroboran. Este Eibar está muy trabajado.
Situado en mitad de tabla (11º) con los mismos puntos que el Madrid, con 2 semanas por delante para trabajar y preparar los próximos partidos contra Depor, Elche, Villarreal, Athletic... Garitano todavía puede mejorar mucho a este equipo y ojo cuando lo haga.
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